La venta de medicamentos y productos veterinarios en mal estado, han cimbrado a los amantes de las mascotas, en redes sociales usuarios se han volcado para exigir a las autoridades sanitarias estatales y federales realicen su trabajo y se pongan a investigar a los establecimientos que expenden este tipo de productos poniendo en riesgo la vida no solo de mascotas, sino también de animales destinados al consumo humano.
En México, de acuerdo con la NOM-073-SSA1-2015 (SSA 2016), un medicamento se considera caduco, una vez que es rebasada su fecha de caducidad, la cual se establece con base en su formulación y características fisicoquímicas, microbiológicas y biológicas, las cuales determinan su calidad, estrictamente controlada en los laboratorios y establecimientos donde se elaboran.
A pesar de ello, una vez que ha expirado la fecha de caducidad de un medicamento, o bien se han incumplido las condiciones de almacenamiento recomendadas, su buena calidad deja de garantizarse y pasan a ser un residuo muchas veces peligroso para el animal que lo recibe.
Una usuaria identificada como «Kja RM» denuncio a través de facebook que acudió a comprar Complenay B12, a una veterinaria ubicada sobre el Boulevard Allende, y el cual fue aplicado a su mascota sin percatarse que era un producto re etiquetado, lo cual es una «jugada» que realizan las veterinarias para no perder la venta y muchas personas desconocen.
«Tengan mucho cuidado y revisen la caducidad del medicamento, ya que reetiquetan el medicamento, fui a comprar complejo B ya que mi perrito se encuentra malito, y el veterinario que lo atiende le receto la vitamina y pues se la compre en la veterinaria ya mencionada, llegue a mi casa y se lo administre como me lo indicaron», dijo.
Añade que posteriormente se percató de que la etiqueta de caducidad estaba sobrepuesta por lo que acudió a reclamar, siendo devuelto su dinero, ya que no pudieron darle otro producto debido a que estaban bajo las mismas condiciones, por lo que hace un llamado a la ciudadanía para que pongan atención en lo que compran y a las autoridades investiguen la venta de productos en mal estado.